lunes, 5 de noviembre de 2012

Sueños Santos


Se desperto Juan Manuel con expresion inusualmente placentera. Le dice Maria Clemencia: parece que soñaste algo muy lindo.
Si, responde con emocion. Me soñe en Oslo recibiendo el Nobel de la Paz. Fue maravilloso.... Despues años de demostrarle al pais que aqui no habia guerra y que lo que habia que hacer era combatir con firmeza el crimen organizado, habia decidido volver a hablar de conflicto interno. Le reconoci al mundo que aqui teniamos una guerra civil. Y que nuestros oponentes tenian el status politico de poblacion en legitima rebelion. Comence a tratar a sus comandantes como se trata a cualquier jefe de estado. Y les propuse que nos sentaramos a negociar la paz. Y no te imaginas la reaccion: todos aplaudian, los periodistas me alababan,  todos los presidentes me llamaban a ofrecer respaldo, iba a la ONU y todos aplaudian cuando yo decia que iba a hacer la PAZ.  Luego me gaste una platica en caviar y vodka en Oslo para ambientar a los guerrillos. En la negociaciones tuvimos que acomodarnos bastantico, pero logramos el acuerdo, firmamos la paz, y al año siguiente me toco ir a Oslo, pero para recibir el premio.

domingo, 21 de octubre de 2012

La Bondad de los Buenos


LA BONDAD DE LOS BUENOS

Un magnifico esfuerzo de Juanes y El Tiempo en recopilar las buenas y positivas palabras de Shakira, Bose, Tutu, y tantos otros, que como bien lo dijo el bueno de Miguelito, nunca han agredido a nadie, pagan sus impuestos y hacen sus mejores esfuerzos para ser buenos miembros de su comunidad y ayudar a los demas.Les hacemos compañia la gran mayoria de los habitantes de Colombia y el mundo. Es muy valioso que repitamos, desde distintos angulos y con posiciones diversas, que la agresion no constituye solucion valida para ningun conflicto. Estimulamos y comprometemos cada vez a mas en la noble causa de la convivencia pacifica.
Pero que hacer, cuando en una comunidad, un grupo minusculo decide usar las armas y metodos criminales para hacerse oir o tratar de imponer su voluntad? Nos replegamos los buenos y pacificos a cantar salmos de alegria, en la esperanza de que algun dia los violentos entiendan? Para efectos poeticos, religiosos o cinematograficos, este es sin duda el metodo mas bello. Pero la brutal realidad, ha mostrato en casi todas las epocas y casi todas las culturas, que cuando los buenos se repliegan y se humillan, los malos se crecen y se imponen.
En Colombia no cesan de preguntarse, con entendible desesperacion, porque, si la mayoria somos buenitos y queremos la paz y no hemos hecho otra cosa que demostrarlo durante años con nuestro pacificifismo pasivo: tolerancia, resignacion y perdon; Porque los violentes se empecinan en ser cada vez mas agresivos? Porque tan pocos, tienen tanto poder para desacomodar a todo un pais, al que ponen a hablar de GUERRA? Porque si se les ha dado la oportunidad a los violentos, de reconciliarse, salen con ese discurso intolerante, violento, anacrónico e impositivo? La utilidad de los tontos a la estrategia de los violentos no tiene limite: que se requerirá para que entiendan que estan armados y defienden sus ideas con violencia precisamente porque no reconocen ni aceptan el dialogo civilizado. No aceptan la democracia. Y estan empecinados en imponernos al 99.5% de los Colombianos pacíficos, sus ideas a la brava.

lunes, 24 de septiembre de 2012



LA PAZ SIN GUERRA

Quien se atreva a buscar una correlacion entre el numero de veces que pronuncia la palabra "PAZ" y el numero de muertes violentas en Colombia, encontrara una asociacion perfecta. Basta con repasar titulares del periodo presidencial de Andres Pastrana para confirmar que la correlacion no falla: entre mas la pronuncien y escriban funcionarios, politicos, periodistas, analistas, personalidades, mas muertes ocurren.
Porque esta contradiccion entre tan bello vocablo que reside en los anhelos y emociones de la mayoria de los Colombianos?
El uso que mas se da al vocablo PAZ es para referirse a la ausencia de guerra.  Y la guerra o "conflicto interno" se refiere en Colombia a guerra civil que significa confrontacion armada entre dos bandos del pais. Cada bando debe representar una porcion significativa de la poblacion y debe tener una ideologia o proyecto coherente o viable y se atiene bien o mal a unos "principios" que regulan las confrontaciones armadas.
El grupo armado Colombiano al que se hace referencia cuando se usan los terminos PAZ y GUERRA,  esta constituido por el 0.05% de la poblacion. El respaldo politico no pasa de 2% y si se cuentan todos los grupos de izquierda con alguna afinidad no llegan al 10%. Su proyecto politico es un revuelto de quejas y reclamos totalmente desuetos y desconectados de la realidad del pais y del mundo. Basta repasar el discurso de Timochenko para entender que alli no hay solucion realista o viable para ningun pais.
Pero la evidencia mas contundente de ausencia de guerra la aportan las FARC con sus acciones: reclutamiento forzado de niños campesinos, secuestros, extorsion, asesinatos, bombas y toda clase de actos terroristas contra la poblacion en general.
Son muchos los paises, inclusive del primer mundo que padecen grupos armados organizados con caracteristicas similares a las FARC.  Y muy pocos hablan de guerra y mucho menos de la necesidad de hacer la paz. Los llaman por su nombre: Crimen organizado u Organizaciones terroristas, segun la combinacion de barbaridades de cometen o daños que le hacen a sus respectivas sociedades. Y los enfrentan con medidas policivas, militares, y de inteligencia, combinadas con educativas y preventivas, segun las caracteristicas y capacidades de cada grupo. Son mas bien pocos los presidentes y dirigentes que deciden enredar a la comunidad en un falso dilema de PAZ o GUERRA.
Ningun pais vive en paz, entendida como ausencia total de conflicto o violencia. Aun los que tienen los sistemas sociales y politicos mas avanzados, tienen grados de violencia que tienen que controlar con un sistema policivo fuerte. Y cuando se relajan, aparecen los barbaros disparando y matando. Siempre con algun discurso ideologico. Siempre motivados por un fin ultimo benefico. Y siempre envueltos en un paquete "humanista".  Y siempre con algun sustento en sectores "intelectuales" que explican la "complejidad" de sus orígenes y justifican la barbarie.
Cualquier turista desprevenido que recorra Colombia le reportara a sus familiares que este no es un país en guerra. No hay por lo tanto paz que negociar. Oponerse a las negociaciones de paz, es un acto de pacifismo. Mirarlas con banalidad: "que tal que me suene la Flauta, dijo Santos", es conducir al país por el camino del crimen y el terror.
Hay que disponer de una extraordinaria capacidad para borrar la memoria, para no entender, que la guerrilla busca espacio y reconocimiento politico para recomponerse y rearmarse. Tendremos que mirar las caras de sorpresa y desvergüenza que pondrán todos estos ilusos cuando lo que suenen sean las bombas y los violines en los funerales de los cientos de policías, militares y civiles. "Es que la guerrilla tiene que mejorar su posicion en la mesa de negociacion" nos explicaran los sabiosociologos que pretenden representar el pensamiento nacional.
Hay que exhibir una muy especial propensión al simplismo, para suponer que con la guerrilla se puede negociar. Léase con cuidado el discurso de Timochenko, la agenda de negociacion y el "ideario" de las FARC para entender, que si se llega a un acuerdo, cediendo en un pequeño porcentaje a sus pretensiones, el resultado será una Colombia, tan desajustada, tan violenta y tan desconectada del mundo, que probablemente en niveles de PAZ quedaremos mucho peor llegando a un acuerdo, que sin lograrlo.
Cuando millones de Colombianos salienron a las calles a gritar: "NO MAS FARC, NO MAS MENTIRAS, NO MAS MUERTES", era porque entendian que la paz que necesitamos, no es la que se logra buscando negociar el fin una supuesta guerra. La paz que buscan y quieren los Colombianos, es la misma del resto de la humanidad civilizada: una disminución progresiva y gradual de la violencia y crimen, con una acción decidida de sociedad y autoridades que le reste poder y capacidad de acción a los criminales grandes o pequeños, organizados o desorganizados.