Hace unas semanas y ante la controversia de la financiación de vías en Antioquía, se armó una “vaca” muy exitosa recogiendo recursos que los paisas usaron para demostrar su independencia del gobierno central.
Simultáneamente aparecieron llamados a un boicot tributario. Se argumentó que Petro dispone de una cantidad enorme de recursos y los está usando para comprar votos subvencionando la pobreza que aplicadamente disemina, financiar grupos criminales que le den supremacía militar en el campo. así como primeras líneas y mingas que acorralen las ciudades. Así, podría imponer reformas radicales, y cambiar la constitución para eternizarse en el poder. La reacción propuesta consistía en apretar al Estado dejando de pagar impuestos.
La propuesta no tuvo eco porque muchos consideraron que se establecía un precedente de desobediencia civil muy peligroso y otros estimaron muy difícil de implementar y riesgoso para los pioneros más atrevidos. Pero sin que oposición alguna se lo hubiese propuesto, apareció en el país del realismo mágico el fantasma de la vaca que ha llevado a la caída en el recaudo de la DIAN más dramática de la historia.
En realidad no ha sido magia, sino la consecuencia de un torpe y errático manejo de la economía por parte del gobierno. Un presidente que no logra entender que con incoherentes y contradictorios tweets, salidos del impulso del momento y cocinados en una mente monotemática, se está logrando arrasar con la poca confianza que queda. No hay inversión, no hay nuevas empresas, se han cerrado miles (200.000 solo en 2024) y los talentos siguen emigrando. El desbarajuste de la economía aún no compromete la calidad de vida de la mayoría porque 20 años de prosperidad y confianza tienen mucha inercia. Es fácil navegar la barca impulsada por gobiernos anteriores y la frenada ocurre lentamente. La dramática caída en los ingresos de la DIAN está probando el absurdo de la ideología que resuelve todo con la intervención del Estado. Aun mentes educadas en economía, usan con frecuencia el universal remedio. ¿Y qué es el Estado? De donde saca los recursos para tanta maravilla? Simplemente no existe si no hay empresas y personas “moliendo” para entregar la harina que lo mantiene.
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sábado, 15 de junio de 2024
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